La Boella. Espai Fortuny

Además del restaurante Espai Fortuny, La Boella dispone de un hotel, un centro de convenciones, una tienda de productos especializados e incluso un molino de aceite...

La Boella es mucho más que un restaurante. Un centro de convenciones, un molino de aceite, una tienda de productos especializados y un hotel forman parte de este complejo lúdico situado a la salida de Reus. Rodeado de olivos, el restaurante, que lleva el nombre de Espai Fortuny, está decorado con objetos y telas del artista Mariano Fortuny Madrazo, escenógrafo, grabador, pintor y diseñador de ropas y alfombras que destacó por sus decorados en obras teatrales. La cocina del Espai Fortuny ha encontrado el equilibrio entre la tradición y la creatividad. Se realiza con productos de temporada, sobre todo procedentes del Camp de Tarragona.

El chef Manuel Ramírez propone cada día un menú que incluye primeros platos como la selección de verduras al dente, el arroz cremoso con gambas y emulsión de ñoras, el foie micuit con mermelada, el crujiente de pan, melón, polvo de pistachos y hojas silvestres o la caballa en escabeche. Entre los segundos se puede escoger entre el rape y foie con crema de patata, aceite de albahaca y tallos crujientes, la merluza rellena de erizos de mar en una cama de brotes de acelgas, tallarines con sepia, aceite de tinta y jugo de pimientos asados o la cola de ternera, cuscús y menta con un toque de remolacha. En las antiguas bodegas de la casa solariega reposan unas seis mil botellas de 180 referencias de vinos de todo el mundo. Disponen también de una fantástica terraza para el verano rodeada de vegetación y de un aparcamiento propio.