Tortosa ofrece un gran número de festivales y fiestas que invitan al visitante a pasar unos días. En la segunda quincena de julio celebra la Fiesta del Renacimiento, donde todo el mundo se traslada al siglo XVI, uno de los momentos más interesantes de la historia de la ciudad.
La primera semana de septiembre llega la fiesta mayor, dedicada a la patrona de los habitantes de Tortosa, la Mare de Déu de la Cinta. Las Fiestas de la Cinta se alargan durante nueve días con procesiones, ofrendas, conciertos, circo, teatro y diversión para toda la familia.
En julio se celebra la Mostra de Jazz de Tortosa, una convocatoria que se incluye dentro de la programación musical estable de la ciudad y que se ha convertido en un referente entre los amantes de esta música en el territorio.
Para los aficionados al senderismo y al excursionismo, el Parque Natural dels Ports resulta una buena recomendación. Pueden llegar hasta la cima del monte Caro o, sencillamente, pasear por la reserva de cabra hispánica más importante del Estado. Además, el Ebro ofrece la posibilidad de practicar deportes fluviales como el piragüismo, la pesca deportiva o el remo.
Por otro lado, el pasado cultural de Tortosa es muy rico y el municipio ofrece las rutas culturales del Al-Ándalus, el barrio judío del siglo VI o la ciudad cristiana de la época medieval.
A la hora de comer, la ciudad dispone de platos mediterráneos a base de arroz, como elarroz a banda, arroz negro o la paella, sin olvidar el pescado y el marisco, así como los postres de tradición familiar: los pastissets, las garrofetes del papa o los tortosins.