Nadie puede evitar gritar cuando hace puenting. Saltar al vacío desde una altura de más de veinte metros es una sensación única. Cogido solamente por los pies, el sueño de volar resulta más cercano.El puenting es un salto pendular desde un puente que se realiza utilizando cuerdas de escalada. Los materiales empleados pueden llegar a soportar más de 1.500 kilogramos. El salto más habitual para quienes comienzan se lleva a cabo de espaldas al vacío. En el segundo salto ya se suele buscar más emoción, y se puede hacer de cara, viendo el suelo.Para efectuar un salto no se necesita ninguna técnica especial. Lo único que se requiere es voluntad, valor y decisión para desprenderse de la barandilla y lanzarse al vacío. Cualquiera puede hacerlo. No existe ninguna limitación de sexo o edad. No obstante, es imprescindible iniciarse en el puenting con un experto. Hay numerosas empresas que facilitan tanto el material como la experiencia necesaria para practicarlo.Las principales empresas en Cataluña se encuentran en los Pirineos. Algunas como TurisGroup, en Espot, en la comarca del Pallars Sobirà, o Rafting Llavorsí, en Llavorsí, también en el Pallars Sobirà, ofrecen la posibilidad de practicar este deporte por poco más de veinte euros.Otra empresa, Indòmit-Quads Olvan, en Olvan, organiza saltos en uno de los mejores puentes de Catalunya, el puente de Saldes, con el fondo impresionante de la montaña del Pedraforca.