Los cítricos de esta comarca se caracterizan por ser jugosos, aromáticos y sabrosos. Son muy conocidos por su excelente calidad, gracias a las características que les otorga el clima mediterráneo litoral de la región. Además, suelen tener un equilibrio perfecto entre acidez y dulzor. Entre las variedades de naranja que más se cultivan en el Montsià destacan la "navelina", la navelate y Valencia late, todas muy jugosas, aromáticas y dulces. Las primeras naranjas de la temporada son las "navelines", que podemos encontrar a los mercados y fruterías a mediados de octubre. La "navelate" se encuentra de enero hasta finales de marzo. La Valencia late es la variedad con más contenido de zumo, muy preciada por su sabor equilibrado en acidez y dulzura. Esta es también la más tardía de las naranjas dulces, ya que se empieza a cosechar en marzo.Desde el año 2003, las mandarinas del Montsià están reconocidas con el sello IGP Clementines Terres de l'Ebre. Las variedades más cultivadas en la comarca son la clementina fina, la clemenula y la "hernandina". Destacan por su piel fina y coloración intensa, son muy jugosas y dulces. En el mes de octubre se empieza a comercializar la variedad más temprana, la clemenula. La sigue la clementina fina, y la temporada acaba, a finales de enero, con la más tardía de todas, la "hernandina".Se consumen mayoritariamente como fruta fresca y en zumo, pero naranjas y mandarinas aparecen también como ingredientes en varios platos de la cocina catalana moderna. Algunos ejemplos son la crema y sopa de naranja con granizado de naranja, el pato con naranja o los buñuelos de arroz con alcachofa y zumo de naranja.Tienen también un lugar destacado entre los dulces: pudings, pasteles, flanes, cremas y sorbetes de naranja o mousse de mandarina.En Alcanar se celebra a finales del mes de abril la Semana de la Naranja en Flor, que promociona este producto con una cata y obsequia los asistentes con naranjas y mandarinas.