La primavera en Cataluña es una época mágica en la que la naturaleza despierta de su letargo invernal y se viste con un manto de colores vivos. Los campos florecen con una diversidad única, desde las praderas de amapolas en las llanuras hasta los bosques de robles y castaños en las montañas. Los paisajes se transforman en un espectáculo visual que invita a explorar y a disfrutar. En esta estación, el territorio catalán ofrece un gran abanico de actividades para deleitarse con su belleza natural y su rica cultura. Desde excursiones por los parajes más emblemáticos hasta la búsqueda de tesoros gastronómicos en forma de setas primaverales, pasando por la celebración de fiestas tradicionales que llenan las calles de alegría y color. Descubre las mejores excursiones primaverales en Cataluña: floración y fauna local La primavera es una temporada encantadora para explorar la diversidad natural de Cataluña. Esta estación viene acompañada de una explosión de colores, con los almendros, melocotoneros y cerezos llenando los campos de flores en un espectáculo efímero. Destacan las Terres de Lleida, pero también otros lugares como la Ribera d’Ebre, el Alt Penedès y el Baix Llobregat. En Sant Climent de Llobregat se puede seguir una ruta entre los cerezos ideal para familias durante el pico de floración, en abril. Itinerarios para conocer la flora y fauna de la primavera Más allá de esta belleza efímera, desde los impresionantes Pirineos hasta las pintorescas calas de la Costa Brava, la primavera propone una infinidad de paisajes donde descubrir una fauna y flora únicas. Una opción popular es recorrer los senderos que atraviesan los parques naturales. El del Montseny, por ejemplo, ofrece rutas que serpentean entre bosques frondosos, prados de flores silvestres y una variada fauna. No hay excusas que impidan disfrutar de la naturaleza, pues hay propuestas para todo el mundo, como el itinerario de la Font del Frare (Santa Fe), adaptado para personas con movilidad reducida. Esta es también la mejor época para explorar la montaña de Alinyà (Alt Urgell), un mirador único desde donde se pueden divisar fácilmente las cuatro especies de buitres del continente: el quebrantahuesos, el buitre negro, el alimoche y el buitre común. Y de aves también va lleno el Parque Natural del Delta del Ebro. Descubrir sus casi ocho mil hectáreas en un solo día es imposible, pero sí que se pueden recorrer algunos de sus parajes. Por ejemplo, el itinerario de la Bassa de les Olles permite atravesar uno de los espacios naturales menos conocidos del delta. Cuatro rutas rodean esta laguna, la más pequeña del Delta, que se pueden hacer a pie o en bicicleta, para ver los pájaros desde los miradores levantados o escondidos entre cañizales. Observación del cielo y orutas a pie o en bicicleta Si se trata de mirar el cielo, el mejor lugar de Cataluña (y uno de los mejores del mundo) para observar las estrellas es el Montsec, con certificación Starlight, que agrupa los mejores cielos del mundo. Una denominación compartida con el Parque Nacional de Aigüestortes i l’Estany de Sant Maurici, otro rincón de las Terres de Lleida que abre la puerta a paisajes como los que ofrece la ruta del Cinquè Llac, una travesía circular que transcurre por las comarcas de la Alta Ribagorça y los Pallars, a través de las antiguas vías de pastoreo. Y, lejos de la montaña, la Ruta del Carrilet lleva, en bici o a pie, de Olot a Sant Feliu de Guíxols; desde las tierras volcánicas de La Garrotxa, pasando por el centro de Girona, hasta las playas de la Costa Brava, donde los más valientes pueden darse el primer baño. Cazar setas de primavera en Cataluña Pese a que el otoño es más conocido por la recolección de setas, la primavera también ofrece su cosecha. Especies como la falsa colmenilla (Gyromitra esculenta), la seta de primavera (Calocybe gambosa), las morillas (género Morchella), las marzuelas (Hygrophorus marzuolus), los perrechicos (Calocybe gambosa) o las senderuelas (Marasmius oreades) se dejan ver en esta época convirtiéndose en preciados tesoros para los cazadores de setas. Las zonas boscosas de Cataluña, desde el Montseny hasta el Parque Natural de Els Ports (las Gavarres, Guilleries, el Collsacabra, el Montnegre y el Corredor, el Moianès, las montañas de Prades), ofrecen un escenario perfecto para la recolección de setas. Entre las comarcas más ricas, destacan las del Pirineo y Pre-Pirineo, Pallars, Alt Urgell, Berguedà, Cerdanya o Ripollès y La Garrotxa. La Cataluña Central, especialmente las comarcas de Osona y El Berguedà, y la cordillera Prelitoral también son zonas preciadas para salir en busca de setas. El Bosque Pintado de Poblet es una propuesta interesante para descubrir el singular itinerario micológico del bosque de Castellfollit, en Vimbodí i Poblet (Conca de Barberà). Esta excursión, ideada para niños, combina un paseo por los bosques del Parque Natural de Poblet con el descubrimiento de las setas dibujadas en los árboles, que representan algunas de las setecientas especies que crecen en este entorno idílico. Disfruta de la exquisita cultura y las tradiciones primaverales de Cataluña La primavera en Cataluña no solo es una época de belleza natural exuberante, sino también una temporada llena de fiestas y actividades tradicionales que celebran la rica cultura catalana. Una de las más destacadas es la Diada de Sant Jordi, que tiene lugar el 23 de abril en honor del patrón de Cataluña. Durante esta festividad, es tradición regalar una rosa a las mujeres y un libro a los hombres. Otra fiesta típica de la primavera es la feria de Sant Ponç, que se celebra en diferentes localidades catalanas, como Mataró y Sant Cugat del Vallès, durante el mes de mayo. Es un homenaje al patrón de los herbolarios, y ofrece la oportunidad de degustar productos gastronómicos y artesanales elaborados con hierbas y plantas medicinales. La fiesta religiosa del Corpus Christi se celebra con mucha pompa y esplendor en muchos pueblos y ciudades de Cataluña. Una de las manifestaciones más espectaculares es la decoración de las calles con alfombras de flores, especialmente popular en poblaciones como Sitges, Solsona o Tarragona. En Barcelona, uno de los actos destacados de esta festividad es el ou com balla, que consiste en hacer bailar un huevo sobre los surtidores de las fuentes situadas en claustros, patios o jardines. Mientras en Berga tiene lugar la famosa Patum, declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, que consiste en una serie de danzas y representaciones tradicionales en la plaza de Sant Pere. La primavera también es época de tradiciones gastronómicas. Muchos pueblos en toda Cataluña celebran fiestas y ferias dedicadas a los productos de temporada, como las fresas (Mataró, San Pol de Mar, Canet o Sant Cebrià de Vallalta), las cerezas (Torrelles de Llobregat) o los espárragos (Gavà), ofreciendo a los visitantes la oportunidad de degustar platos tradicionales e innovadores elaborados con ingredientes frescos y de calidad.