Hay que mojarse. Los que buscan sensaciones fuertes y no experimentan fácilmente el vértigo deben probar el hidrotrineo. El deportista navega sobre una plancha, prácticamente dentro del agua, y siente en su propio cuerpo la fuerza de la naturaleza.El hidrotrineo consiste en el descenso individual de ríos rápidos en una tabla de poliuretano en forma de trineo. El participante va estirado y se sujeta a un asidero. Durante el descenso, más de medio cuerpo (hasta la cadera) va sobre la tabla, mientras que las piernas están sobre el agua. Calzados con unas aletas, los pies se utilizan a modo de timón y también para controlar la velocidad.Los tramos del río aptos para la práctica del hidrotrineo se encuentran en las zonas de alta montaña. La mejor época es la primavera, coincidiendo con el período de deshielo, cuando aumenta el volumen de las aguas y el río gana velocidad y bravura. El Noguera Pallaresa es el mejor de Europa para practicar este deporte a lo largo de sus más de sesenta kilómetros navegables.Antes de iniciar el descenso, el monitor reúne en tierra al grupo, y da una charla sobre las instrucciones del manejo de la tabla, el control de la velocidad, el modo de realizar los giros, etcétera. Después se introducen en aguas fáciles, donde hay que poner en práctica todos los consejos. Al finalizar, el grupo ya está preparado para iniciar el descenso.Una de las muchas empresas catalanas que facilita material y formación necesaria para practicar el hidrotrineo es Yeti Emotions, en Llavorsí (comarca del Pallars Sobirà, Lleida).