Ingredientes Para 4 personas: 300 gramos de bacalao desmigado desalado 400 gramos de judías blancas cocidas (de bote o caseras) 2 tomates maduros pero firmes (tipo pera o de ensalada) 1 cebolleta o 1/2 cebolla de Figueres pequeña 1 pimiento verde pequeño (opcional, tipo italiano) 50 gramos de aceitunas arbequinas o negras (al gusto) Aceite de oliva virgen extra Vinagre de vino blanco o de manzana Sal Pimienta negra (opcional) Utensilios necesarios: bol grande para mezclar, cuchillo y tabla de cortar, escurridor Tiempo de preparación: 20 minutos (si el bacalao ya está desalado y las judías cocidas) Dificultad: baja Pasos a seguir Si usas judías secas, ponlas en remojo la noche anterior (unas 8-12 horas). Al día siguiente, escúrrelas, ponlas en una olla con agua fría nueva que las cubra, una hoja de laurel (opcional) y un poco de sal (añade la sal hacia el final de la cocción para evitar que la piel quede dura). Cuécelas a fuego medio hasta que estén tiernas, el tiempo variará según el tipo de judía (entre 45 minutos y 1 hora y media aproximadamente). Una vez cocidas, escúrrelas y déjalas enfriar. Si usas judías de bote, simplemente escúrrelas bien bajo el grifo para quitar el líquido de conserva y resérvalas.Asegúrate de que el bacalao esté bien desalado. Si es necesario, desmígalo un poco más con las manos para que quede en trozos pequeños. Lava los tomates y el pimiento verde (si lo usas). Corta los tomates en dados pequeños. Pela la cebolleta y córtala en rodajas finas o en trocitos pequeños. Corta el pimiento verde también en dados pequeños, eliminando las semillas y las partes blancas. En un bol grande, combina las judías escurridas, el bacalao desmigado, los dados de tomate, la cebolleta y el pimiento verde. Añade las aceitunas. Riega generosamente con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Añade un chorrito de vinagre al gusto. Espolvorea con un poco de sal (cuidado si el bacalao todavía conserva un punto de sal) y pimienta negra si quieres. Mézclalo todo con cuidado para que los sabores se integren, pero sin aplastar los ingredientes. Tapa el bol y deja reposar el ‘empedrat’ en la nevera durante al menos 30 minutos antes de servir. Esto hará que los sabores se mezclen mejor y esté más fresco. Presentación del plato y guarniciones recomendadas Sirve el ‘empedrat’ frío, directamente del bol o en platos individuales. Es un plato que se puede disfrutar como entrante, plato único ligero o acompañamiento. No necesita muchas guarniciones adicionales, ya que es muy completo. Un poco de pan de payés tostado o unas tostaditas pueden ser un buen acompañamiento para mojar en el aceite de la ensalada. Hay quien le añade un huevo duro cortado en cuartos por encima. Otras recetas relacionadas que puedes preparar ‘Esqueixada’ de bacalao ‘Xató’ Ensalada catalana Escalivada