Embárcate en un viaje apasionante por Lleida, porque todo lo que buscas está en el interior. Este descubrimiento te llevará a conectar con la naturaleza, probar los mejores productos locales, activarte con los deportes de aventura e inspirarte en una tierra con un rico patrimonio cultural. Además, podrás recorrer desde los paisajes de las Terres de Lleida hasta las cumbres del Pirineo. Aquí tienes algunos de los lugares más destacados que no puedes perderte: La singularidad de la Val d’Aran Empieza tu viaje de descubrimiento por las Tierras de Lleida-Pirineos de Cataluña en la Val d'Aran, un valle pirenaico, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, que combina tradición, naturaleza y singularidad. Es el único valle atlántico de los Pirineos de Cataluña, con impresionantes lagos de origen glacial y kilómetros de rutas por territorios vírgenes. Además, cuenta con una cultura y una lengua propia: el aranés. En su entorno natural se encuentran pequeños pueblos con encanto donde se pueden visitar iglesias románicas de los siglos XI y XII. La cultura y gastronomía singulares de la Val d'Aran se fusionan perfectamente con la naturaleza, permitiendo conocer la historia de esta región a través de sus itinerarios. Prueba una olla aranesa tras hacer una ruta senderista para descubrir saltos de agua como el de Saut deth Pish, una cascada espectacular de 50 metros, o bien aprovecha para subir al telesilla Blanhiblar para disfrutar de las vistas del valle. Este telesilla está situado en la estación de esquí de Baqueira Beret y el paseo solo se puede realizar en verano. El remontador asciende a una altura de 2.220 metros. Desde allí puedes contemplar el paisaje de alta montaña del Pla de Beret y Val de Ruda. Este valle de origen glacial acoge bosques de pino negro y numerosos lagos glaciales situados entre cumbres escarpadas. También se pueden ver los picos del Aneto, el más alto de los Pirineos, a 3.404 metros, y el Montardo. Esta montaña de 2.833 metros de altura es muy conocida por ser el mirador más completo de la Val d'Aran. El telesilla Blanhiblar permite subir las bicicletas, así que es posible realizar rutas BTT por el entorno natural que rodea la estación de esquí. Un paraíso natural: el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici Sigue tu aventura en el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, el único Parque Nacional de Cataluña que está situado en el corazón del Pirineo leridano. Este paraíso comprende el Pallars Sobirà, el Pallars Jussà, el Alta Ribagorça y la Val d'Aran. Cuenta con cumbres de entre 1.200 y 3.000 metros, bosques frondosos y prados verdes, donde el agua, con más de 200 estanques y numerosos ríos, barrancos y zonas húmedas es la protagonista. Su entorno natural invita a descubrirlo a través de excursiones a pie, en ruta BTT, a caballo y con raquetas de nieve en invierno. Una buena manera de conocer el parque es acceder montado en el teleférico de la Vall Fosca a 2.200 metros de altitud. Desde allí puedes hacer excursiones para ver los 32 lagos de este valle, hacer la Vía Verde del Carrilet de 5 km o recorrer la conocida ruta por los refugios del Parque Nacional, denominada "Carros de Foc". El Pirineo de Lleida también cuenta con dos parques naturales: el Parque Natural de l'Alt Pirineu y el Parque Natural del Cadí-Moixeró. Tesoros románicos: las iglesias de la Vall de Boí Sigue tu viaje hacia la Vall de Boí, donde podrás disfrutar de las impresionantes iglesias románicas, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el 2000. Este conjunto arquitectónico, formado por ocho iglesias y una ermita de los siglos XI y XII, es el máximo exponente del románico catalán y está considerado uno de los más importantes del mundo. Destaca por tener el mismo estilo arquitectónico y por su concentración en un espacio tan reducido. Acércate al Centro del Románico, un centro de interpretación donde te situarán en el contexto de la época en que se levantaron las iglesias y entenderás su importancia. En el ábside de Sant Climent de Taüll podrás ver proyectado, a través de un mapping, cómo era el ábside original que actualmente se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña. Te sorprenderá. En el Alta Ribagorça, durante el verano, las iglesias románicas comparten protagonismo con las Festes del Foc de todo el territorio, también declaradas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Si tienes tiempo, tras hacer la ruta por las iglesias románicas, párate a relajarte en la Estación Termal de Caldes de Boí. Este centro termal es uno de los más importantes de Cataluña por la cantidad y diversidad de aguas. Ofrece una amplia variedad de tratamientos terapéuticos, puesto que cuenta con 37 fuentes de aguas mineromedicinales de distintas composiciones y temperaturas, entre los 4 y los 56 grados. Rafting en el río Noguera Pallaresa y turismo activo Si buscas emoción y naturaleza, los Pirineos de Lleida son un paraíso para disfrutar del turismo activo y sentir la adrenalina. Cuentan con uno de los mejores ríos de Europa para la práctica de deportes de aguas bravas: la Noguera Pallaresa, en el Pallars Sobirà, con 60 kilómetros navegables para todos los públicos. Este río es perfecto para practicar actividades como el rafting, el descenso de barrancos, el kayak, el hidrospeed y el piragüismo. Si prefieres un ritmo más tranquilo, la red de embalses y pantanos de la zona ofrece una forma relajada de explorar el entorno. En el pantano de la Torrassa puedes animarte a practicar el Big SUP, una modalidad de stand up paddle que consiste en ponerse de pie sobre una tabla que flota en el agua y remar. Una actividad que fusiona el equilibrio con el esfuerzo y la relajación. Si te gusta el senderismo en Lleida-Pirineos de Cataluña dispones de una red extensa de 5.700 kilómetros de caminos señalizados, incluyendo 11 senderos de gran recorrido. También hay carreteras poco transitadas entre cumbres para practicar el cicloturismo panorámico y seis centros de BTT para pedalear entre la naturaleza. Esta zona de los Pirineos también es un punto de referencia para los amantes de las actividades aéreas como el parapente, el ala delta y los vuelos en globo. Los valles de la Noguera y el Alt Urgell son reconocidos como algunas de las mejores zonas de vuelo libre a escala mundial. Si te gusta esquiar, en invierno cuentas con 11 estaciones de esquí alpino y nórdico, para disfrutar de los mejores descensos. De hecho, Lleida tiene una de las superficies esquiables más grandes del Estado, repartida entre la Val d'Aran, el Pallars Sobirà, el Alta Ribagorça, el Solsonès, el Alt Urgell y la Cerdaña. Descubre una tierra de castillos Durante dos siglos, las Terres de Lleida fueron frontera entre el mundo árabe y el mundo cristiano. Este periodo dejó como legado una serie de castillos esparcidos por todo el territorio leridano, especialmente en el Pallars Jussà, la Noguera, la Segarra, el Urgell y las Garrigues. Estos castillos, a pesar de no ser inmensas fortalezas, son majestuosos y están muy bien conservados. Estaban erigidos habitualmente en lo alto de cerros para garantizar la seguridad de los lugares fronterizos y como ostentación del poder. Cada castillo tiene una historia única que espera ser explorada, ofreciendo un viaje a través del tiempo. En la Noguera se encuentra el castillo de Montsonís que conserva la prisión y un pasillo secreto para huir, y también el castillo de Os de Balaguer, conocido como el inconquistable o Malignum castrum que acoge el Museo de las Campanas de Cataluña. Si lo visitas conocerás de cerca las peculiaridades del trabajo de campanero, verás varios tipos de campanas y te adentrarás de pleno en las batallas entre los Condes de Urgell y los de Cabrera y otros hechos históricos que tuvieron el castillo como escenario. En el Urgell, el castillo de Montclar destaca por la escalera a la planta noble, el salón de música, la biblioteca, el comedor señorial, la prisión y la bodega. Un cielo de estrellas: Montsec, destino turístico Starlight Adéntrate en la sierra del Montsec, situada entre la Noguera y el Pallars Jussà. El Montsec es un lugar natural perfecto para la observación astronómica en Cataluña, con un cielo nítido y sin contaminación lumínica que te permitirá descubrir las maravillas del universo. Estas características han hecho que el Montsec y sus valles adyacentes sean reconocidos como reserva y destino excepcional para la observación de las estrellas por parte de la Fundación Starlight, organismo avalado por la UNESCO. Aquí se encuentra el Parque Astronómico del Montsec. Este cuenta con una instalación única en el mundo: el Ojo del Montsec. Una sala con una cúpula móvil de 12 metros de diámetro y un sistema activo 3D para contemplar con comodidad el cielo. El Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici también es reserva y destino Starlight y ofrece oportunidades de contemplar el cielo para los amantes de la astronomía. Además, otros centros astronómicos como el del castillo de Lladurs en el Solsonès completan esta oferta astronómica única en las Terres de Lleida y los Pirineos de Cataluña. Cuando llegues en tren a Lleida no dejes de descubrir su entorno. Te espera una aventura en plena naturaleza por castillos medievales e iglesias románicas bajo cielos estrellados. Déjate seducir por el encanto de las Terres de Lleida y los Pirineos de Cataluña.