Los fesols de Santa Pau son muy apreciados por la finura de su sabor y el escaso tiempo de cocción que necesitan. Al comerlos resultan muy tiernos y su textura no es nada harinosa. Su variedad se denomina vaina gris y, durante muchos años, se cultivó solamente para el consumo de los payeses de esta población de la Garrotxa. Los fesols se cultivan durante el verano y se cosechan a principios de septiembre.Se pueden cocinar de diversas maneras. Tradicionalmente, se hacían acompañados de butifarra esparracada (abierta) o tocino, pero modernamente hay una gran variedad de platos en que los sirven, como las tostadas de fesol con puerros y butifarra negra, los fesols con caracoles, las "crêpes" de fesol o los fesols con sepia. A finales de enero se celebra en Santa Pau la Fera del Fesol, coincidiendo con San Antonio. A mediodía es tradición que se prepare una fesolada popular en la que se degustan los platos elaborados con este alimento. También es una oportunidad excelente para comprarlo.